Uno de los primeros contactos que tuve con el Centro Social Okupado y Autogestionado (CSOA) Casas Viejas fue cuando me decidí a escribir un reportaje sobre el movimiento okupa en Sevilla. Al cabo de unos meses Casas Viejas fue el centro neurálgico del MayDaySur 06. Ya no sólo era interés periodístico, también personal lo que me hizo pasar bastante tiempo en el último año en este edificio ocupado, además de la gente que allí he ido conociendo.
Casas Viejas es uno de los dos CSOA de Sevilla, junto a de San Bernardo, CSOA Sin Nombre. Además es el más antiguo y con más vida. El próximo 5 de octubre finaliza el plazo fijado por el juez para realizar el desalojo voluntario.
Este inmueble, antigua fábrica de aceites, es propiedad de la familia Bordas Marrodán, al igual que la vivienda ocupada anexa y toda la manzana donde se sitúa, cercana a la plaza del Pumarejo y la muralla de la Macarena. El edificio llevaba abandonado desde hace un par de décadas, y en su interior sólo había medio metro de basura que lo cubría. Un grupo de personas, procedentes de movimientos sociales y otro centro social desalojado, lo ocuparon, limpiaron y dieron vida.
Biblioteca, bar, un gran salón de actos, estudio de grabación y una nave contigua. Estos espacios han acogido durante estos años infinidad de actividades. Teatro, malabaristas, taller vegano, de flamenco, fiestas, cabaret y punto de encuentro de diferentes asambleas y movimientos. Así Casas Viejas, junto a un fuerte movimiento vecinal y social, que encontramos representados en Casa de La Paz y la Casa Palacio del Pumarejo, sirvieron para dinamizar, rejuvenecer y mejorar el barrio.
Ahora parece que casas Viejas será desalojada con seguridad en los próximos días. En su lugar irán viviendas de lujo y equipamientos comerciales. Curioso ver cómo los que han mejorado el barrio ahora tienen que irse. Casa de la Paz tampoco podrá hacer frente a la subida del 50% del alquiler.
El sábado a las 18.00 horas, una manifestación contra el desalojo dará comienzo en la Plaza de San Pedro, donde ya en febrero se congregaron más de 2.000 personas por el mismo motivo. Después habrá un concierto y luego una rave.
Sí creo en la propiedad privada, pero también en los espacios gratuitos (autogestionados) para los ciudadanos, y los espacios libres de especulación urbanística. Por eso estoy a favor de la despenalización de la okupación y no estaría mal una ley que aplique un tiempo de desalojo que sea directamente proporcional al tiempo de abandono de las viviendas e inmuebles. Es decir, mientras más tiempo de abandono, más tiempo hasta un desalojo. Eso sí, también la expropiación a partir de un cierto tiempo.
Casas Viejas se queda¡
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