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Francisco Artacho, @artatxo

Periodista, sobre todo en prensa escrita. Pasé por El Correo de Andalucía, Agencia EFE, Cadena Ser, Localia, Público y Viva Sevilla. Ahora buscando de nuevo trabajo. Mientras tanto, el Becario en Bici

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viernes, 16 de noviembre de 2007

El Centro de Adultos Manolo Reyes, en el Cerro del Águila (barrio de Sevilla), edita un libro donde sus alumnos escriben su propia “Memoria Histórica”

Recuperando su propia Memoria Histórica. Así han aprendido, o mejorado, a leer y escribir decenas de alumnos del Centro de Adultos Manolo Reyes que han formado parte del Taller “El olvido está lleno de memoria”. Tres años después de que se pusiera en marcha esta iniciativa educativa singular el centro editará un libro donde se recogen algunas de las historias, escritas por los propios protagonistas.

“Me llamo María, pero en realidad mis padres me llamaron Libertad Mariana Pineda, pero tuvieron que cambiarme el nombre…”. Así comienza una de las muchas historias que se han rescatado en este Centro de Adultos desde que se pusiera en marcha este proyecto de Educación Popular de Liberadora e investigación-acción, basado en la pedagogía de Paulo Freire (cuyo sujeto es la persona adulta que aprende y expresa sus sentimientos en libertad). Ahora el centro, con la colaboración del Ayuntamiento de Sevilla y Cajasol, editará un libro con algunas de las historias.
Para realizar el proyecto se grabaron en vídeo más de 30 entrevistas. Pero no fue fácil. Era la primera vez que algunos de ellos hacían públicas sus historias durante la Guerra Civil y la dictadura y muchos alumnos tenían miedo y no se decidían a hablar. Después ellos mismos comenzaban a escribir de su puño y letra sus historias, de acuerdo con su nivel de lecto-escritura. “De esta forma sus relatos se convierten en un apoyo didáctico”, explica José María López, director del centro. Además se les enseña a contextualizar históricamente su experiencia.
Fruto de este trabajo educativo es el libro, donde se expresan 8 historias contextualizadas social e históricamente.
El proceso de investigación se completa con el análisis de las entrevistas, escogiendo los centros de interés comunes a todas ellas y comparando estos relatos con que historiadores y novelistas han escrito. Uniendo la realidad de las historias de vida, la ficción de la literatura y la ciencia de la historia para recuperar el pasado de una forma popular. Un ejercicio de libertad a través de la educación.

Nota: hoy se presentó el libro. Conocí este taller hace varios años, publicando en El Correo de Andalucía un reportaje que quedó genial. Historia preciosas, de gente que por primera vez se libera después de años de recuerdos encerrados. Muchos de ellos han tenido miedo, pero hoy sus ojos brillaba den felicidad.
Al meno el periódico Público sacará mañana un reportaje sobre ellos y su taller.

Publicado por Francisco Artacho a las 1:00  

Etiquetas: educación, periodismo

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