Nuevo periódico de tirada nacional.

Nace un nuevo periódico de tirada nacional (y no gratuito). Cuanto menos ilusionante, más para un periodista. El periódico Público es el segundo periódico nacional a cuyo nacimiento asisto. El primero fue La Razón., al menos el primero del que fui consciente. Me compré aquel primer número, la curiosidad mató al gato. Estaba hojeándolo en la barra del bar de mis padres, cuando un cliente me dijo "joder, niño, qué haces con un periódico tan facha". En aquel momento no entendí muy bien qué queria decir. Era pequeño.

Pero intuyo que compraré más de una vez Público. Por ahora por simple cercanía y amnistad: cuatro buenos amigos y compañeros de El Correo de Andalucía se han embarcado en esta aventura y forman parte de la redacción andaluza. Son jóvenes, son periodistas, tienen ilusión, son periodistas, son buenos, son periodistas. "Mañana compra El Público, que sea lo primero que hagas", me dice una y otra vez Raúl y Olivia desde hace más de una semana. Ellos son tan amigos como compañeros de profesión.

Dos tíos besándose en un bar, gente pidiendo derecho a techo, por una vivienda digna vamos. Quien me conozca lo sabe. Sí, me siento identificado. Aquí os lo dejo. Ojalá nos ilusione tanto como a Raúl y Olivia.***



Ellos serán el principal motivo por el que lo compraré no sólo una vez. La primera es por descontado, cualquier periodista que se precie lo comprará. Supongo que mañana a las 8:30 de la mañana, en la Faculta de de Comunicación, todos lo tendrán ya en su poder. La verdad es que no creo que lo hagan ni el 5% del alumnado. Pero bueno, yo sí lo llevaré, y atenderé a este nuevo diario más que a los profesores. Aunque me quedaré con las ganas de que alguno ponga su lectura como ejercicio de clase. Si alguno lo hace, iré todos los días a sus clases.

"Este periódico lo han hecho pensando en ti", me dice Raúl. Miro el anuncio y yo también lo pienso, aunque con la prudencia de pensar que esto no será más que márketin, que en el fondo no es más que una empresa más de comunicación, donde imperarán intereses antes que el periodismo. Ojalá me equivoque, y ojalá Raúl tenga ilusión.

Dos tíos besándose en un bar, gente pidiendo derecho a techo, por una vivienda digna vamos. Quien me conozca lo sabe. Sí, me siento identificado. Aquí os lo dejo. Ojalá nos ilusione tanto como a Raúl y Olivia.***

***Alberto y Alicia también estarán ilusionados, pero no he podido compartir estos días con ellos. Suerte a los cuatro.